¿CÓMO Y CUANDO BEBER KOMBUCHA?

¿La kombucha, para qué sirve? ¿Cómo incorporo kombucha a mi día a día? ¿Qué cantidad puedo tomar para notar sus efectos? ¿Cuándo beber kombucha? ¿Qué momento es el más adecuado? Has oído hablar mucho de kombucha, de los beneficios saludables de este té fermentado con orígenes ancestrales, pero tienes algunas dudas que necesitas despejar antes de empezar a consumirla. Esperamos que estas pautas te resulten útiles:

¿Cuándo es mejor beber kombucha?

En primer lugar, debes tener en cuenta que Mūn Kombucha no es un medicamento, ni tampoco forma parte de ninguna terapia concreta. Entonces te preguntarás, ¿para qué sirve la kombucha? Nuestra kombucha es una bebida con un montón de propiedades saludables. Es probiótica, por lo que tu sistema digestivo y tu humor estarán felices a más no poder si la incluyes en tu rutina diaria. Además, es desintoxicante por lo que nunca viene mal tomar un trago. Sobre todo, con el ritmo que llevamos todos, ¿no crees?

¿Cuánta kombucha tomar?

Te recomendamos que, si no has tomado nunca, empieces poco a poco, con unos 100 mililitros al día. Según tolerancia, aumenta la dosis hasta tomarla un par o tres veces al día.

Es difícil que beber kombucha te produzca efectos secundarios. Como mucho, notarás más movimiento intestinal. Lo normal es que experimentes una sensación de bienestar.

¿La kombucha lleva cafeína y alcohol?

Al ser un fermentado de té, la kombucha sí lleva un poco cafeína, exactamente lleva unas seis veces menos cafeína que una taza de café, por lo que si eres especialmente sensible a la cafeína, te recomendamos no beber kombucha hacia el atardecer, ya que podría afectar tu sueño.

La kombucha lleva menos de un grado de alcohol. Es una cantidad tan baja que no se le considera bebida alcohólica, pero debe tenerse en cuenta para las personas especialmente sensibles al alcohol o si le va a ofrecer a un niño.

¿Cuándo no se debe tomar kombucha?

Para algunas personas con circunstancias de salud concretas, como las que sufren sobre crecimiento bacteriano (SIBO), está desaconsejado el consumo de kombucha. Te aconsejamos que soluciones este problema para poder introducir el té fermentado en tu dieta.

En otros casos, como diabetes, cándidas o otras patologías, remitimos la decisión sobre el consumo de kombucha a tu especialista de salud.

Algunas ideas de cuándo tomar kombucha

Ahora que ya tienes más datos acerca de para qué sirve la kombucha, ¿necesitas ideas de cuándo incluir la kombucha en tu día a día? Aquí tienes unas cuantas:

1. Tómala en ayunas. Será entonces cuando aprovecharás más sus propiedades probióticas y desintoxicantes.
2. Recupérate con un vaso de kombucha después de entrenar. Aportarás minerales, vitaminas y enzimas, además de ácidos orgánicos que te irán de perlas para rehidratarte y remineralizarte.
3. Sustituye el café de media mañana por una kombucha y siente como tu energía y tu buen rollo se ven beneficiados.
4. Antes de cualquier comida, abrirá tu apetito y preparará tus intestinos para tener una digestión de 10 gracias a sus enzimas y ácidos orgánicos.
5. Durante la comida, compartiendo tus platos preferidos. Mejorarás tus digestiones y harás tus ágapes más divertidos con su suave burbuja y sus increíbles sabores (tenemos 10 variedades y los maridajes son prácticamente infinitos).
6. ¿Comida pesada? Kombucha para terminar y se acabaron los problemas.
7. ¿Tienes resaca? Prueba a tomar un vaso de kombucha y facilita el trabajo de desintoxicación del hígado y, con ésta, la de tu cuerpo. ¡Te ayudará seguro!
8. A media tarde para evitar la cafeína de ese café al que estás habituad@ o el azúcar que te aporta ese refresco con el que matas el hambre.
9. Para finalizar el día, en vez de una copa con alcohol. Sírvela en tu copa o vaso preferido y ya nos contarás.
10. Cocina con kombucha: Añade a tus platos favoritos un chorro de kombucha, como si de vino se tratara. Le dará un fabuloso sabor y continuará manteniendo las propiedades que le otorgan los ácidos orgánicos.

Las posibilidades de cuándo beber kombucha son prácticamente infinitas. El resumen es: Toma una kombucha cuando veas que mejor te sienta y conviértelo en un hábito.